jueves, 29 de agosto de 2013

Pensamiento divergente


Por un lado salir a montar en bici con gente es mucho más entretenido, pero hacerlo sólo te permite coger mucho mayor ritmo y hacer un entreno más personalizado y específico.
En mi caso, me encanta ir con mis amigos y me resisto a no salir con ellos. Si algo creo que hay que hacer en esta vida es buscar la felicidad y cuando la encuentras haciendo algo con tu gente, creo que se debe cuidar.
Pero también es verdad que cuando la divina providencia hace que te quedes solo, te das cuenta que cuando vas con otros no vas todo lo fuerte que puedes, que a veces te paras a esperar, que no llevas exactamente tu ritmo y en definitiva, que haces un entreno mucho más suave.
Hoy he hecho 40km fuertes en la Mountain bike. Podía haber cogido la de carretera pero justo antes de salir ha habido una tormenta y me ha dado un poco de miedo, me he equivocado. La verdad es que hacía viento, especialmente molesto a la vuelta que me pillaba más de cara, pero pese a todo he ido más rápido que nunca. He llegado un poco cansado pero feliz como una perdiz.
Ayer volví a nadar, 1.8km algo más suaves que el lunes, pero bien, en series de 500 metros para empezar a coger distancia. Pronto reanudaremos el club y empezaremos a darle caña a la fuerza.
Mañana descanso y el sábado vuelvo a correr, a probar la rodilla. Lo echo mucho de menos.
Espero volver al TRI que tantas alegrías me está dando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario