domingo, 14 de octubre de 2012

primer triatlon acabado

Lo hicimos, hemos acabado. Ha sido espectacular.
Llevar tu cuerpo al límite en ese momento.
Lo he dado todo, lo juro. No creo que haya hecho un tiempazo ni mucho menos (entorno a 1:50).
Os cuento lo que ha sido, pero sin quejas ni excusas, todo lo contrario soy feliz como una perdiz.


Al principio, ni Santi ni yo nos enteramos que dan la salida. No avisan. Salto y me como las gafas, literal. Me quedo arreglándolas unos segundos. Cojo ritmo y al grupo, pero en la segunda boya me vuelven a quitar las gafas. Recoloco y palante. Esto es bastante normal. El agua de la casa de campo, asquerosa, si, algo he tragado.
Salgo del lago y voy atrás pero cómodo, veo a Santi, mi compi. Me espera. Salimos y subimos un mini repecho que casi me cago vivo. El plato grande no me entra en la bajada. Me empieza a agobiar que Santi me espere tanto. Entonces llegamos al puto "garabitas", que se me ha atragantado 3 veces, tantas como he tenido que subirlo. Al empezar la primera vuelta el puerto, le he dicho a Santi que se fuera a su ritmo, que no me esperara (honestamente, es una puta máquina). Y cuando asciendo o eso parece, después de otra bajadita, viene un repecho donde se me sale la cadena. Parada en mitad de la cuesta y a arreglar, menos mal que es fácil y no he perdido mucho tiempo. Pero he quedado tocado.
En la segunda vuelta he intentado apretar, pero no. En la tercera, cansado, he decidido acabar con todo lo que me quedaba.
La carrera bien, otro calvario pero esperado. He corrido más lento de lo entrenado pero juro que no me salía nada de ningún sitio, no había gasolina.
Sin ser excusa ni mucho menos, porque estoy muy contento. Llevo desde el sábado sin parar de ir al baño, a arroz y agua de limón. No he bebido ni comido nada en carrera por miedo a tener que ir al baño. En cualquier caso, el objetivo se ha cumplido, llegar y en menos de 2 horas.
En mejores condiciones igual hubiera hecho 1:40, quien sabe, pero lo dicho: Llevar tu cuerpo al límite en ese momento.
Gracias a María, Mara, Teo, Carlitos, Lucia, Jaime, Santi, Sion y Jules, por esos últimos metros. Sin vosotros seguro que no acabo.
Y os dejo la famosa foto de la lengua. (podéis comprobar lo blanca que está)
Feliz Domingo. Me voy a desmayarme al sofá.


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