Este fin de semana ha sido especialmente positivo.
El viernes a media tarde salí con la bici de carretera. Al principio con mucha pereza y sintiendo todavía algunos dolores de las agujetas de la semana. Según le metía km al cuerpo mejor me sentía, así que fenomenal. Volví a salir con la bici de carretera y todo fue bien, buena estabilidad, buenas vibraciones... Para los que venimos de la Mountain Bike, la bici de carretera nos genera un amor odio extraño. Vamos muy rápido comparativamente pero yo personalmente no me acabo de encontrar cómodo, o tan cómodo como en la de montaña. En cualquier caso, todo fenomenal. Casi 40 km de trabajo bien hecho. Veremos que nos encontramos por allá.
El sabado por la mañana salí a correr con la intención de hacer distancia, de empezar a correr largo, de probar la resistencia. Salió un día perfecto para correr, fresquito. Y el cuerpo lo agradeció y se portó fenomenal. Es verdad que no le metí mucha caña hasta el final, de forma muy progresiva. Hay que tener en cuenta que ahora, reiniciando la máquina hay que tener cuidado con no pasarse. Yo lo hice hace 3 semanas y anduve acojonado con una rodilla, así que ayer lo hice de otra manera y todo fue bien. El resultado 11.5km y con la sensación haber podido correr mucho más. Pensé mucho en "La Montaña Solidaria".
Y hoy, Mountain Bike con los amigos y luego entreno de transición corriendo, 3 km. Todo fenomenal, desde la compañía con viejos reencuentros hasta la carrera final que no se me ha hecho muy dura.
Dicho todo esto, creo que ya poco puedo hacer. Plantear una semana normal hasta el miércoles y a partir de ahí bajar el ritmo y llegar descansadito a la carrera. La verdad es que no me he planteado nada, simplemente disfrutarla a tope.
Ya os contaré.
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